La primera de ellas es 'Las ventajas de ser un marginado' ('The Perks of Being a Wallflower'); adaptación cinematográfica de la novela de 1999 del mismo nombre y ópera prima de Stephen Chbosky, quien además es el autor del libro. Protagonizada por Logan Lerman, Emma Watson y Ezra Miller, se trata de un drama de corte romántico en el que la adolescencia, la amistad y la homosexualidad se conjugan de manera satisfactoria para ofrecer un relato que aunque en un principio parezca ser una amalgama de clichés y estereotipos se desliga de ellos y deshoja progresivamente y de manera sutil un argumento adulto, duro e incluso oscuro pero cuyo mensaje final invita al optimismo. El punto de partida de largometraje es la entrada de Charlie en el instituto tras haber pasado por una época de su vida un tanto oscura -información que el espectador poco a poco descubre- y a partir de entonces deberá hacer frente a asuntos como la propia amistad, los conflictos familiares, las primeras citas, el sexo, las drogas y por supuesto su pasado. La película cuenta además con una serie de personajes secundarios interpretados por famosos rostros televisivos como Kate Walsh ('Anatomía de Grey'), Nina Dobrev ('The Vampire Diaries'), Joan Cusack ('Shameless') Mae Whitman ('Parenthood') y Dylan McDermott ('American Horror Story') y una acertadísima banda sonora compuesta por canciones como Heroes de David Bowie y Asleep de The Smiths.
"Aceptamos el amor que creemos merecer." -Charlie
La segunda de ellas es 'El lado bueno de las cosas' ('Silver Linings Playbook') cuyo director es el siempre polémico David O.Russell. En este caso se trata de una dramedia romántica cuyo punto de partida también resulta demasiado oscuro. Bradley Cooper y Jennifer Lawrence dan vida a Pat y Tiffani respectivamente; dos personas que en los últimos meses de sus vidas se han adentrado en una espiral de autodestrucción por culpa de sus ex-parejas pero que a raíz de su primer encuentro comienzan a recuperarse. Pat regresa a casa de sus padres (Robert de Niro y Jacki Weaver) tras haber pasado ocho meses en una institución mental por agredir al amante de su mujer y con el único propósito de recuperarla. Por su parte, Tiffani se refugia en el sexo tras haber muerto su marido. Divertida y triste, la película emociona y provoca carcajadas a partes iguales gracias a las excéntricas y exageradas personalidades de sus personajes. La pareja protagonista desprende una química increíble y el tramo final del largometraje -en total dura más de 2 horas- es conmovedor.
La tercera y última es 'Las sesiones' ('The Sessions') de Ben Lewin. John Hawkes interpreta a Mark O'Brien, un poeta y periodista tetrapléjico que a sus 38 años decide perder la virginidad. En su camino en busca del placer se encontrará con la ayuda de un sacerdote (William H.Macy) y una "profesional del sexo" llamada Cheryl (Helen Hunt). Retorcido argumento que sin embargo permite desarrollar un relato que desprende naturalidad y amor por la vida misma. Me sorprendió bastante el desnudo integral de Helen Hunt y el humor tan ácido del personaje de Mark.
Tres películas que dejan una gran sonrisa de oreja a oreja; ¡al mal tiempo, buena cara!
Tres películas que dejan una gran sonrisa de oreja a oreja; ¡al mal tiempo, buena cara!
No hay comentarios :
Publicar un comentario